Tuesday, September 27, 2011

PARA PENSAR...

MOTIVACION:
Esta mañana mientras veía la lluvia caer a través de la ventana de mi habitación muchas preguntas llegaron a mi vida. Tal vez la lluvia fue la ocasión para pensar en las cosas complicadas y cotidianas de la vida que de una u otra manera logran inquietar nuestra existencia y que se hace inevitable no pensar en ellas porque están ahí, presentes en lo que somos. Cada una de las situaciones de la vida nos plantea un mundo de preocupaciones que se hace a veces complicado encontrar caminos que nos ayuden a salir de cada una de ellas.
Entonces por unos instantes fije mis ojos en la gotas de lluvia que caen sobre las ramas de los árboles y cuando estas caen sobre las hojas de los arboles logran darle al árbol un verde diferente, un verde de frescura que invita a pensar que las alternativas a los problemas quizás no hay que buscar estas, en las cosas grandes o extraordinarias sino en lo pequeño como lo es una gota de agua. Sin embargo, aprender a construir alternativas desde lo pequeño no es tampoco fácil porque nosotros estamos llenos de temores y ansiedades que en muchos momentos nuestro mismo estado de ánimo impide que podamos ver eso “pequeño” desde lo cual podemos construir.
Entonces, es cuando se hace necesario apelar a Dios para que él nos ayude a suavizar el camino, a quitar lo que estorba, lo que nos permite ver con claridad por donde podemos reorientar nuestras vidas. Por lo tanto, podemos pensar que las palabras del salmista cuando dicen, “Guárdame, oh Dios, porque en ti busco refugio (Salmo 16:1), tienen sentido para nosotros cuando intentamos buscar salidas a nuestros sentimientos, emociones, conflictos diarios de la vida, porque se hace necesario que para poder encontrar y construir desde lo pequeño nosotros necesitamos comprender que Dios está ahí, para ayudarnos y brindarnos protección y refugio de tal manera que sintamos que estamos acompañados. Es casi la idea o la imagen de lo que hace una madre cuando su hijo tiene temor, miedo o angustia o sencillamente se ha caído y la madre lo ve, lo toma en sus brazos y le ofrece ese refugio simbolizado en un abrazo y que le da seguridad para sentir que aun en los momentos más difíciles el podrá estar bien, sintiéndose protegido, en refugio. Por eso, considero que si nosotros queremos avanzar en la construcción de salidas a nuestros problemas y necesidades particulares y comunitarias necesitamos aprender a confiar en Dios, si hacemos esto, será más fácil aprender a confiar en nosotros mismos y en las capacidades que podemos desarrollar para poder construir desde lo pequeño. Además, es importante sentir que Dios es nuestro refugio y que él nos ofrece su brazo en el cual podemos sentirnos plenamente confiados y capacitados para direccionar nuestras vidas y encontrar salidas a cada una de las situaciones que alteran nuestra existencia.
Reflexiona:
1. ¿Qué piensas de estas palabras?
2. ¿Qué mensaje encuentras en el salmo 16:1 y ¿En qué momentos lo lees?
3. ¿Crees que es posible construir alternativas o buscar salidas desde lo pequeño?
Recurso:
Santa Biblia (1999). Nueva Versión Internacional. NVI-NIV








No comments:

Post a Comment

Renace

Renace... Renace el pensamiento en las luchas de mi pueblo, renace la vida que entre metáforas construye utopías, renace aún desde la ari...